El marplatense ganó los ATV’s del Enduro del Invierno ante una multitud en la zona de La Perla. Enorme espectáculo potenciado por un domingo soleado.
Preciso instante en que José Guerra cruza la meta para ganar en ATV para delirio de todo el público marplatense.
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Esta vez, todo salió redondo. El clima también se asoció a la fiesta y la otorgó al rotundo triunfo de un marplatense, José Guerra, el marco ideal para semejante conquista. El piloto local, un experto en este tipo de competencias, se adjudicó la categoría ATV (cuatriciclos) con una demostración de manejo exquisita y un medio mecánico formidable.
Si bien ya había ganado en el EDA (Enduro del Atlántico), en 2022, éste es su primer triunfo en el Enduro del Invierno (EDI), ya que el año pasado sufrió un desperfecto mecánico que lo dejó fuera de carrera cuando marchaba primero y con grandes posibilidades de victoria.
En las motos, en una muy atractiva y cambiante carrera, el francés Camille Chapeliere también se sacó una mochila pesada de encima, con su primer triunfo en suelo “albiceleste”, en donde afirma sentirse como en su casa.
El radiante sol matutino invitó a una multitud a sumarse a la fiesta en los balnearios de La Perla. Un afluencia fenomenal de público, tanto para presenciar no sólo la destreza de los pilotos sobre el circuito de 4,2 kilómetros de extensión, sino también de todas las actividades complementarias planificadas por la organización de EDV Entertainment en estrecha colaboración con el gobierno municipal.
Más de 300 máquinas (125 ATV’s y 205 motos) ofrecieron un excelente espectáculo en la costa marplatense. Y con sol, por supuesto que todo parece mucho mejor.
El entusiasta apoyo del público local obró como un impulso extra para Guerra, quien se cuidó de cualquier roce en el siempre difícil “embudo” de la largada. Pasó por primera vez por el sector del “súper prime” en el sexto puesto, pero antes de terminar la vuelta inicial se apoderó del primer lugar y nunca lo abandonó.
A punto de cumplirse los 45 minutos estipulados para iniciarse la última vuelta, el cronómetro le jugó una mala pasada al marplatense, que pasó por el control antes de cumplirse el tiempo y, por lo tanto, hubo que dar dos vueltas más. Esa duda permitió que el saladillense Lucas Estomba, quien venía lejos, acortara la distancia en el tramo final, si bien la victoria del piloto local nunca corrió peligro.
Al cruzar la meta con la bandera a cuadros flameando, se desató una locura en el sector de llegada y posterior podio con premiación. El representante de La Lucila del Mar, Santiago Caliendo, completó el podio.
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