
Construido en 1903 e inaugurado en 1909, el paseo era uno de los atractivos de la Mar del Plata aristócrata. Antes de la reinauguración, Constanza Addiechi, encargada de la restauración de lo que queda del paseo, aseguró que se trata de “una joya del patrimonio urbano”. Lagos, fuentes, estatuas traidas de Francia y bancos frente al mar formaban parte del paisaje costero que Carlos Thays habia diseñado para la Mar del Plata aristocrática hace 122 años. Este sábado, luego de un arduo trabajo de restauración, se reinaugurará la Escalera Imperial. Antes, en diálogo con 0223, la directora de Restauración de Monumentos Históricos explicó cómo fue el trabajo de recuperación del único registro que queda del paseo emplazado en 1903.El paseo original se extendía desde lo que hoy conocemos como Plaza Colón, explanada Sur y explanada Centenario hasta la costa. La obra contaba con una gran terraza frente al Torreón contenida por muros de piedra y, a sus pies, jardines, miradores, kioscos, estatuas y farolas. “La escalera Imperial es el último testimonio de Carlos Tahyis,en Mar del Plata. Esta escalera que desciende en un tramo principal desde el bulevar hasta un descanso, y después se abren dos brazos irregulares acá en la zona entre las Toscas y el Torreón. Es lo último del antiguo Paseo General Paz”, sostiene Addiechi visiblemente orgullosa del trabajo realizado, y agrega: “Es una joya que tenemos del patrimonio urbano”.
Para realizar una restauración fidedigna, el equipo de trabajo de la funcionaria realizó una investigación profunda de la época aristocrática de Mar del Plata. “Lo digo y me agarra una cierta emoción, porque fue una investigación muy profunda de documentos originales”, revela, al tiempo que explica que el trabajo comenzó hace tres años.