
Mariano Charlier convivió durante toda su vida entre sus tareas como DT de juveniles y el rol en la playa. A los 50 años, pasó del interinato a técnico principal en el “Tiburón” y pelea por concretar su gran sueñoCharler inició su quinto interinato en Aldosivi en marzo del 2025 y luego fue ratificado con el objetivo de salvar al club del descenso (Foto: Roi Tamagni / Infobae)
“El fútbol no me cambió nada todavía… ¡Yo tengo una Meriva modelo 2012 que no la puedo vender! Me metí en un plan de ahorro, soy un laburante», dice Mariano Charlier y lanza una carcajada tímida. Habla pausado entre sorbo y sorbo de mate desde unos los sillones plásticos que él señaló porque tenían una posición estratégica respecto al sol en esta cálida mañana invernal. A los 51 años, transita por la orilla de un giro radical de su vida después de casi tres décadas alternando entre su pasión por el deporte y su amor por la playa.
Mariano intentó ser futbolista pero las lesiones minaron ese sueño justo al mismo tiempo que su otro gran amor comenzaba a surfear su vida. Mientras se recibía de profesor de educación física e iniciaba sus primeros trabajos como DT de niños, Charlier se sentaba bajo el sol de Mar del Plata para trabajar como guardavidas en uno de los balnearios más concurridos del país. Ese puesto desde el mirador por primera vez está en stand by en tres décadas porque el objetivo es salvar del descenso a Aldosivi en la Liga Profesional.