
El tricampeón fue el más rápido de la clasificación y este domingo, que contará con series y final, buscará llegar a la punta.Son momentos de definición para el Turismo Carretera, al que le quedará una sola fecha más cuando pase la carrera en Toay. Cada punto, cada sesión y cada posición se pelean hasta las últimas circunstancias. Por eso mismo, un Mariano Werner (Ford) que corría de atrás en la Copa de Oro y logró acomodarse con su victoria en San Nicolás festejó con todo haber sido el más rápido del sábado. El tricampeón metió su segunda pole position en la temporada (la 30ª histórica) y este domingo, cuando se larguen las series, arrancará el Mustang con la esperanza de verse en lo más alto de cara al Gran Premio Coronación en La Plata.
“Antes de ir a San Nicolás estaba más para pensar en la temporada que viene… Cómo cambió el panorama”, dijo Marianito en diálogo con Campeones Radio. No se equivoca. Sabe que tiene el aura, con la que ha ganado tres campeonatos y se ha posicionado como uno de los grandes referentes del Óvalo, pero le estaba faltando el auto. En sus últimas apariciones en pista, el caballo que figura en la parrilla galopó como nunca: por la clasificación, en la que los participantes de la Copa de Oro entraron en un grupo aparte, Werner aprovechó la succión de José Urcera (Ford) para ganar unos milisegundos cruciales, redondear una vuelta de 1m14s151 y quedarse con la pole, justo por delante de Marcelo Agrelo (Toyota) y Juan Manuel Trucco (Dodge).