Las jubilaciones y los salarios llevaron la peor parte.
Hacia adelante, la reducción de la inflación podría impactar en las cuentas públicas.Pese a que en el relato oficial sostiene que la mayor parte del ajuste que permitió alcanzar el superávit de las cuentas públicas fue por recorte de privilegios y gastos innecesarios, un informe de la consultora Empiria precisa que el impacto real fue el de la «licuadora» que se sintió especialmente sobre jubilaciones y salarios.