
La historia delictiva de Alejandro Salaberry, aquel asaltante que en 2003 participó del brutal asesinato del policía Christian Agusti durante un asalto, parece estar destinada a retroalimentarse y nunca acabar. Ahora, en tiempos en los que su salud se resquebraja dentro de la cárcel de Batán por cuestiones oncológicas, la Justicia le aplicará una pena de 7 años y 6 meses de prisión por sus dos últimos hechos.
El acuerdo de juicio abreviado entre Salaberry y el fiscal Leandro Arévalo tiene relación con dos causas, una por la tentativa de homicidio que cometió contra un vecino en el año 2018 en el partido de Merlo, donde vivía una vida normal bajo el nombre de Lucas Lamas. La otra por resistir a los tiros su detención en mayo de 2022, cuando cumplía arresto domiciliario.