
El ataque, entonces, habría obedecido a que el agresor sospechó que el denunciante intentaba sustraer el automóvil. Pero no fue todo: además, el propio acusado de efectuar el tiro posteriormente le había robado al herido documentación personal.
Mientras el hombre baleado en su pantorrilla izquierda permanecía internado en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), fuera de peligro, la policía iniciaba la investigación del caso bajo las órdenes de la fiscal Romina Díaz.